Asegúrate de que las fibras de la brocha estén cubiertas uniformemente en todo el contorno con el producto seleccionado. Apoya la brocha en tu dedo medio mientras lo sostienes con el dedo índice y el pulgar. Esto ayudará a controlar el movimiento del pincel y lograr un trabajo de línea más preciso. Mantén la punta en un ángulo pequeño con la piel y permite que el lado largo de las fibras ayuden a crear la línea. La punta del pincel se puede utilizar para afilar o agregar una punta cónica al delineado de los ojos.